En la fiesta brava, el indulto significa que al final de la lidia de un toro, no se cumple el tercer tercio en su totalidad. En lugar de darle muerte, pasa a los corrales para recuperarse de la lidia, sometiéndose a las curas necesarias para su recuperación y devolverlo a su campo de origen como semental.
Su nueva vida como semental comienza para dedicarlo a la reproducción.
El indulto es un reconocimiento al toro, en grado superlativo, tras una brillante faena. Perfección en la entrada a la muleta, capote, respecto al picaor y banderillero. Un elogio al ganadero, en cuanto a la crianza, manejo y eficacia de sus métodos y experiencia aplicada. Un claro premio a su labor como criador.
Para esta decisión, la mayoría del público aficionado tiene que solicitar el indulto, el torero también ha de pedirlo y con el consentimiento del ganadero, el presidente de la plaza otorga el indulto.
El toro gana su vida por su bravura, clase y nobleza.
Premio a labor como ganadero, nuestro novillo “Fiel”, de la ganadería El Cotillo con hierro UOC, obtuvo el indulto el día 3 de junio del 2017 en Santisteban del Puerto, siendo toreado por el diestro García Navarrete. Un gran orgullo para nuestra ganadería y nuestra gran fiesta taurina.
“Lo primero que intento transmitir es que el toro tenga casta, que sea bravo en el caballo, que embista por derecho sin derrotar y metiendo los riñones, que tengan fiereza y nobleza. Pero que no embista en tonto, sino en bravo”.
Victorino Martin.